Actualmente, la propiedad horizontal es una de las formas de vivienda más comunes en Colombia, especialmente, en zonas urbanas, como la capital, en donde el 70% de los hogares pertenecen a este modelo. Al ser tan popular, cada vez más se evidencian los beneficios, pero también las desventajas de este tipo de propiedades, convirtiéndose en un punto focal para el sector de la vivienda.

Uno de los mayores problemas en conjuntos residenciales es la inseguridad, seguido de problemas o retos en la convivencia, espacios y administraciones. Es por ello, que la tecnología está ofreciendo soluciones vitales para tratar con algunos de estos desafíos. En Metrocuadrado te contamos todo sobre este tema.

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Problemas cotidianos en la propiedad horizontal

La convivencia en propiedad horizontal es propensa a caer en conflictos, ya que requiere del acuerdo de varios propietarios en temas controversiales. Estos son algunos de los conflictos más comunes que se presentan en estas viviendas, según nos menciona Properix:

-Uso de lugares comunes y sus regulaciones: espacios como salones sociales o parqueaderos compartidos generan disputas, pues en muchos casos, los reglamentos internos suelen tener muchos vacíos en cuanto a las condiciones de uso de estas zonas, desatando así conflictos entre propietarios

-Cuotas de administración: el atraso en pagos es un conflicto constante. Usualmente, se da por desconfianza de la gestión administrativa o cláusulas no claras sobre todo cuando se tienen unidades de uso mixto

-Comportamientos inapropiados y sanciones: infracciones como el ruido excesivo, mal uso de las zonas comunes, incorrecta clasificación de residuos, o problemas más graves como comportamientos agresivos, daños a propiedades, etc., deben tener su sanción pertinente establecida en el reglamento interno del conjunto, y en el caso de hechos más graves, refugiarse en las leyes del país. Sin embargo, es muy común que los procedimientos sancionatorios no sean claros y por ende, considerados injustos para algunos propietarios, razón por la cual se crean conflictos

-Asambleas y participación: la ausencia de quórum en asambleas o el desconocimiento de los procedimientos para tomar decisiones afectan el funcionamiento general. Sin participación activa, la toma de decisiones se vuelve lenta o, en el peor de los casos, inefectiva

-Transparencia en las finanzas: según cifras de Properix, más del 70% de los copropietarios en Bogotá no recibe información detallada sobre las finanzas de su conjunto. Esto genera un ambiente de desconfianza que puede afectar la convivencia general.

Si bien, todos estos problemas comunes tienen su solución más próxima en establecer comunicación clara, reglamentos más efectivos, e información más detallada para los propietarios, hay un problema que más grave que agobia a los inmuebles en propiedad horizontal, y que no encuentra respuesta en los reglamentos, ya que surge de un fenómeno social: la inseguridad.

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Inseguridad: el problema más grande de la propiedad horizontal

Según el Ministerio de Defensa, entre enero y abril del 2024 se presentaron 9.890 denuncias de casos de robos a residencias en Colombia; aunque esto presenta una reducción del 22% frente al mismo periodo en 2023, para los propietarios esto no parece ser así.

De acuerdo con la Encuesta de Convivencia y Seguridad Ciudadana del DANE 2023, el porcentaje de ciudadanos que se sienten inseguros en su ciudad subió de 44% a 52,9% en el último año medido. La encuesta también reveló que el 75% de las personas siente que la delincuencia ha aumentado. Esto se debe a que cada vez existen más modalidades de robos a conjuntos.

Entre las más comunes presentadas, se encuentran la suplantación de funcionarios de servicios públicos o domiciliarios, y el ingreso por zonas vulnerables en horarios de baja vigilancia. Como lo revela la Corporación Excelencia en la Justicia (CEJ), al menos el 25% de los hurtos a residencias involucran herramientas como llaves maestras, lo que indica planificación y violencia en los accesos. A pesar de que este panorama no resulta favorecedor, parece existir una esperanza en la tecnología.

¿Puede la tecnología disminuir la inseguridad?

Varios conjuntos residenciales han comenzado a adoptar tecnologías enfocadas en seguridad y gestión. Entre las más destacadas están:

-Citofonía virtual y control remoto de accesos, que permiten validar la entrada de visitantes desde el celular. Plataformas como Properix, que operan bajo el modelo PropTech, permiten a los residentes recibir en su celular la notificación de un visitante desde portería, ver su imagen en tiempo real, y autorizar el ingreso desde cualquier lugar. Esta tecnología también deja un registro digital de cada entrada y salida, fortaleciendo la trazabilidad dentro del conjunto.

-Plataformas de gestión con cifrado en la nube, cumpliendo con la ley de protección de datos 1581 de 2012, evitando así riesgos cibernéticos.

Además, recientemente se aprobó en Bogotá la integración de cámaras privadas al sistema de monitoreo de la Policía Metropolitana (C4), lo que abre la puerta a una vigilancia colaborativa entre conjuntos y autoridades locales.

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¿Gasto o inversión?

Tecnología

Al escuchar soluciones tecnológicas, se tiende a pensar en el costo de estas, sin embargo, puede ser que resulten ayudando a reducir gastos. Estos modelos eliminan gastos en citófonos físicos, cableado, líneas telefónicas, mensajería física y múltiples plataformas; además, contar con esta tecnología le suma valor al conjunto residencial, pues esta experiencia de los residentes y su sensación de seguridad va a hacer que se diferencie de otras opciones para futuros compradores.

Aunque algunas operan bajo modelos que no requieren inversión inicial ni licencias (como Properix), el cambio cultural y operativo sí implica una inversión de tiempo, capacitación y adaptación. No todas las viviendas en propiedad horizontal tienen la capacidad de acceso para este tipo de soluciones tecnológicas, aun así, pueden realizar acciones intermedias que aumenten la percepción de seguridad como fortalecer la comunicación interna y consolidar registros manuales que, aunque más limitados, contribuyen a mejorar la organización.

Daniel Laverde, vocero de Properix, nos responde más afondo cómo funcionan estas tecnologías y sus beneficios

Conclusión

La adopción de tecnologías en los conjuntos residenciales no es una solución mágica, pero sí representa una herramienta poderosa para mejorar la percepción de sus residentes, fortalecer los protocolos de acceso y optimizar la gestión administrativa. Lejos de ser un lujo, estas soluciones pueden convertirse en inversiones estratégicas que no solo elevan la calidad de vida de los residentes, sino que también aumentan el valor del inmueble.

Además, este ambiente de seguridad también se construye desde la información, por ello, en Metrocuadrado nos convertimos en aliados para propietarios, residentes y administradores en cuanto a estar actualizados sobre temas de importancia.

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Por: Properix. Edición: Isabela Gonzáles

Fuentes consultadas: DANE, Properix, Minsiterio de Defensa

Guía de propiedad horizontal