Cuando se trata de proyectos de reparación de viviendas es aconsejable, incluso para los más experimentados contar con la ayuda de un profesional.
 

Arreglos eléctricos
 

Cuando se trata de reparaciones eléctricas en el hogar, un movimiento incorrecto podría provocarte una descarga o incluso quemar tu casa. Muchos proyectos eléctricos serios requieren un permiso, incluso si no, cualquier cableado dentro de las paredes, el techo o la caja del panel debe ser manejado por un electricista autorizado y asegurado. Las casas más antiguas pueden tener cableado no tradicional, lo que también puede requerir herramientas o procedimientos especiales.
 

Eliminación de asbestos
 

Si crees que es posible eliminar el asbesto al estilo ‘hazlo tú mismo’, deja este proyecto a los profesionales. La exposición a este material de aislamiento tóxico puede ser mortal, y tratar de eliminarlo sin un experto te pone en grave riesgo y también a tu familia.

 

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Techos
 

Desde reparaciones simples hasta reparaciones severas en el techo, intentar hacer esto  sin experiencia en esta área puede causar más daño que beneficio. No solo podrías lastimarte gravemente, sino que también puedes dañar la integridad estructural de tu hogar por no contar con las habilidades y herramientas adecuadas.
 

Ventanas
 

La instalación y el reemplazo adecuado de las ventanas requieren herramientas y habilidades especializadas. Si te falta alguno, déjalo en manos del que sí tiene experiencia en esta tarea.
 

Fontanería
 

Las modificaciones importantes a un sistema completo de tuberías, como desviar o extender tuberías, pueden resultar literalmente en un baldado de agua fría o peor aún de agua caliente y costar millones de pesos en daños por despilfarro de agua en cuestión de segundos si no tienes la pericia necesaria.

 

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Aparatos de gas
 

Si hay una fuga de gas en tu casa, llama a un experto de inmediato, estas se producen debido a que las líneas se mueven, se enganchan o se vuelven a sellar incorrectamente y pueden provocar resultados catastróficos, como incendios, explosiones y envenenamiento fatal por monóxido de carbono.
 

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