Andrés Moreno/ Producción - Laura Guana / Redacción - Alfonso Gutiérrez / Fotografía

 

El apartamento del acordeonero Juancho de la Espriella, en Bogotá, cumple una máxima del diseño: “Menos es más”. (Así vive el reggaetonero paisa, Maluma)

 

De hecho, en los 370 metros cuadrados de la vivienda, que por su espacio podría estar abarrotada de accesorios y muebles, cada detalle está bien dispuesto, sin recargar. (Angélica Jaramillo y su propia "casa estudio")

 

El resultado es producto del trabajo del diseñador Fernando García, quien integró lo contemporáneo con la sencillez y sobriedad de varios elementos clásicos. (Jimmy Zambrano nos muestra su hogar)

 

 

Arquitectónicamente, llaman la atención los espacios amplios, la luz que da claridad a cada ambiente del apartamento y el uso de la madera en los pisos y acabados.

 

Igualmente, están los detalles de diseño del mobiliario. Ya sea el comedor auxiliar de la cocina, el sofá o los ‘puf’ de la sala, entre otros, tienen el toque diferencial que los hacen únicos.

 

A estos se suman los recursos decorativos representados en los cuadros y algunas esculturas blancas que contrastan, perfectamente, con la madera y los tapizados del mobiliario en tonos café, tierra y beige.

 

Y aunque se trata de un apartamento grande, en el que podría utilizarse más color en los muros –como se hizo en el pasillo de entrada, con un papel oscuro–, la decisión del blanco en la mayoría de los espacios es acertada porque evoca algo del minimalismo y, de paso, hace que las áreas se vean más amplias.

 

En la zona social también impacta el uso del mobiliario con tonos tierra, negro y texturas geométricas con curvas creadas para el confort. Por su parte, la habitación es un lugar que el músico identifica como “bastante sencillo e ideal para el descanso”.

 

Otro lugar que el acordeonero destaca es el cuarto de su hija que, asegura, fue diseñado para motivar la creación y para soñar. Allí sobresalen las pinceladas rosas y los toques geométricos de la estantería.