La Directora del Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá, Ana Marta de Pizarro, nos abrió las puertas de su hogar. Sin duda, son más de 250 metros cuadrados llenos de buena energía y mucha historia.
 

En este apartamento Ana Marta vive hace dos años, y ella misma se ha encargado de cada detalle. Está decorado con varios objetos que en medio de sus viajes por el mundo ha comprado en los “mercados de las pulgas”, uno de los lugares que no puede dejar de visitar cada vez que tiene oportunidad.
 

Un lugar lleno de arte e historia
 

Lo primero que podemos ver a la vista al momento de entrar a la casa de Ana Marta es una espaciosa zona social y rápidamente logramos identificar algunas piezas arqueológicas en varios rincones que nos recuerda que Ana es antropóloga de profesión.

 

 

Desde este lugar se empieza a notar el estilo propio de Ana, hay dos sofás en cuero negro con cojines forrados en tela de flores. En este aspecto Martha Pizarro prefiere los tonos oscuros que con ayuda de otros elementos decorativos le dan más vida al lugar, prueba de ello son las sillas tapizadas en cuero rojo.
 

En el centro de mesa se encuentran diferentes juegos de té comprados en Argentina y Polonia. Desde este momento se empieza a apreciar la importancia que el arte ha tenido en su vida, y de inmediato nos muestra un cuadro que perteneció a su amiga Fanny Mikey, el cual está tallado en madera y cuida con gran cariño.
 

Además los libros son pieza importante en la decoración y en gran cantidad se pueden apreciar muy ordenadamente en la biblioteca y en algunas mesas.
 

Sin duda hay dos tipos de cuadros que llaman nuestra atención. Los primeros son dibujos a lápiz, hechos por su hijo y que están colgados en las paredes de una bella chimenea que además de dar calor al hogar, sirve para dividir el área social del comedor. El otro cuadro está un poco más escondido, aunque para Metrocuadrado debería estar un lugar más visible donde se robaría todas las miradas, se trata de un bello retrato en gran formato a blanco y negro de Ana Marta tomado hace algunos años.
 

Un espacio con gran valor familiar
 

El comedor como ella misma lo define es un lugar único, es un mobiliario que ha pasado de generación en generación desde su abuela materna hasta llegar a sus manos. Ana ha agregado algunas sillas modernas que hacen un contraste perfecto entre lo antiguo y lo contemporáneo.
 

Este espacio también lo decora un mueble para las botellas de vino, y que sirve de repisa para exhibir algo muy especial para Ana Marta, son fotografías de sus hijos, nietastros y de su gran amiga Fanny Mikey.
 

En el fondo se puede apreciar una cocina abierta, allí Ana considera muy importante que la persona que se dedica a cocinar, en ocasiones ella, tenga un buen espacio donde desenvolverse. En este lugar no podía faltar algún detalle muy personal de Ana, cada vez que viaja por el mundo, compra condimentos y elementos que en Colombia son difíciles de conseguir.
 

El lugar privado de Ana Marta
 

La habitación de Ana Marta cuenta con mucho espacio y comentó que en cuanto a decoración prefiere la ropa de cama blanca. Allí también se encuentran diferentes elementos que han sido regalados por sus amigos entre los que se destaca una matrioska blanca y en especial una muñeca de trapo de cabello rojo encendido que representa a Fanny y al mostrarla le recordó que ella en cada uno de sus viajes traía una muñeca para Manuela, la hija de Ana.
 

Apreciando este bello detalle que nos recuerda el gran trabajo que Fanny hizo por el teatro Colombiano y mundial, Ana Martha de Pizarro nos hizo la invitación a todos los amigos de Metrocuadrado para asistir al Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá, que será del 4 al 20 de abril y donde Brasil es el gran invitado.
 

Andrés Moreno Bejarano / Redacción - Mauricio Riaño Martínez / Producción - Alfonso Gutierrés / Fotos.