El lavamanos es, tal vez, uno de los lugares que más resalta en el cuarto de baño de nuestra casa. Según los expertos en remodelación, decoración y montaje de estos espacios, hoy en día el lavamanos va mucho más allá de su propia función, pues cada vez su componente estético toma más fuerza.

 Para esta oportunidad, Corona presenta su nueva colección de lavamanos, clasificándolos en cuatro tipos:

 Lavamanos en vidrio, los más arriesgados del mercado

Su principal característica es que usan una arriesgada pero innovadora técnica de de decoración conocida como opalizado. Si usted quiere darle un verdadero toque de originalidad a su baño, esta técnica es la perfecta. Consiste en el uso de pinturas o estampados sobre la capa externa del lavamanos, creando así cualquier tipo de figuras que queramos, dándole aspectos en cuanto a textura y color.

 Recuerde que esta técnica solo puede ser usada en los lavamanos hechos en vidrio o cristal.

 Piedras naturales, al servicio de los lavamanos

Se dice que el uso del color verde en los diferentes objetos ayuda a que los diferentes espacios de nuestra casa tengan ambiente natural. Aunque es muy cierto, hay otras maneras y materiales con los que podemos decorar nuestra casa o apartamento. Y es este tipo de lavamanos de Corona el que nos permite ratificar esta teoría.

 El uso de piedras naturales como el mármol o el travertino permite darle a nuestro baño un toque de elegancia y sobriedad, algo totalmente distinto a los opalizados. Generalmente están hechos en colores neutros (de ahí su función decorativa) y su mantenimiento suele ser muy especial, debido a lo fino que puede llegar a ser su material.

 La cerámica, un material que nunca pasa de moda

Sin lugar a dudas, estos lavamanos son diseñados para los amantes de lo clásico, para los tradicionales. Sin embargo, Corona ofrece a este público la posibilidad de no quedarse en lo anticuado, sacando al mercado lavamanos en cerámica con innovadoras formas geométricas (ovalados y rectangulares) y con estampados, como flores, tribales o paisajes.

 Los lavamanos en cerámica, por su material, son los más indicados para instalarse como pedestales, convirtiéndose en un detalle estético que, además de ayudar en la decoración del baño, esconde la tubería que muchas veces nos parece molesta.

 Tenga en cuenta que los lavamanos en pedestal son recomendables para baños amplios, ya que estos no permiten que se ubiquen cajoneras como soporte debido a su estribo que arranca desde el piso, ya sea en forma cilíndrica, cuadrada, cónica, entre otras.

 Lavamanos empotrados, ideales para baños pequeños

Si el baño de su casa o apartamento no pasa de los 5 metros cuadrados, este tipo de lavamanos es el ideal para sacarle el máximo provecho a ese espacio limitado que muchas veces nos quita la posibilidad de montar un baño lo suficientemente llamativo.

 Esta solución consiste en montar el lavamanos sobre un mueble que nos sirva como gabinete para guardar los objetos de aseo, como jabón, cepillo dental, toallas, entre otros.

 Asegúrese del material, diseño y color que escoja para el mueble, ya que este dependerá, en gran medida, del tamaño y tipo del lavamanos; los hay dobles y sencillos, rectangulares, circulares y hasta ovalados.

 Por ejemplo, un mueble en madera, combinado con un lavamanos blanco en cerámica, le dará sencillez y elegancia al baño.

 Recuerde que lo importante es combinar estética y funcionalidad para que su baño tenga el aspecto deseado por usted y que se convierta en un lugar muy agradable en su casa.