Marzo 2015 - Para Carolina Lineros y Ernesto Puente la arquitectura es como madurar un vino. Conocimiento y paciencia se requieren para llegar a la mejor decisión que, bien  decantada, acierta a la hora de interpretar el espacio. Los arquitectos se tomaron su tiempo para llegar a este resultado sorprendente y sofisticado que pone de manifiesto que unos toques de elegancia y brillo en el diseño tienen un gran efecto final, sin importar que se trate de unos pocos metros disponibles.
 
La vivienda se ubica en el piso 17 de un edificio localizado en un barrio de Bogotá que en los últimos años ha visto transformar su perfil urbano gracias a la construcción de decenas de proyectos residenciales en altura. Los arquitectos retomaron este apartamento de 56 m² en obra gris para reconfigurarlo por completo y crear un hogar urbano, cómodo y acogedor para ellos y su mascota. Sus creadores lo describen como un espacio “amplio, flexible y dinámico”.
Proyectar amplitud en este mono ambiente fue la consigna. Esto se logró con la carpintería arquitectónica color gris desarrollada por Pedro Londoño de la firma La Carpintería, y con el piso de vinilo con apariencia de madera de Lamitech S.A.  

La habitación principal se configura con un mueble con un acabado en pintura blanca de poliuretano que le da cierta intimidad al cuarto sin cerrarlo del todo y manteniendo la fluidez, mientras que en el espacio contiguo se organiza un vestier abierto, enmarcado por unos clósets en madera de flormorado mallado. Allí se instaló el lavamanos y detrás de unas ligeras puertas de vidrio templado se situaron el sanitario y la ducha, y además, la lavandería.

Todo queda oculto cuando se despliega la puerta corrediza de madera con acabado en espejo de cara al área social.

Adaptarse al área disponible fue el gran reto del trabajo de arquitectura e interiorismo que se coordinaron meticulosamente para aprovechar cada centímetro. Por ejemplo, a la entrada del apartamento, el baño de visitas semejante al de un avión, cuenta con un lavamanos en mármol hecho a medida mientras que un espejo de pared a pared logró el milagro de inspirar una sensación de amplitud.

Lo mismo ocurrió en la cocina donde muebles italianos desarrollados a medida por la firma Biefbi, importada por Ergos Collection S.A. permitió  
brindar funcionalidad y elegancia a un mismo tiempo, como lo deja ver el mueble alto con un acabado en hojilla de oro que contrasta con el blanco y el gris del resto de su superficie.

La isla compacta contiene la estufa y espacio de almacenamiento. Y destacando aún más sus proporciones, un plano de madera sobre una base de hierro oxidado se prolonga para convertirse en una mesa para comer o de trabajo.  

La sofisticación aparece en este apartamento con toques especiales de diseño con los que se realzan ciertos puntos, como el papel de colgadura con visos plateados que enmarca la cama, la pintura gris brillante del baño social que crea dramatismo, el uso del color verde agua en las puertas de vidrio templado, o el muro que enmarca la zona social para un efecto relajante y fresco.

La iluminación, que es tan importante en el trabajo de estos jóvenes arquitectos, resulta en un capítulo aparte que terminó por llevar el apartamento a otro nivel de refinamiento, enfatizando ciertos puntos y logrando que la combinación de distintas fuentes de luz ofrezcan otra experiencia del espacio.      

Así se refieren Carolina y Ernesto a este aspecto de la obra: “la iluminación ha sido un elemento muy importante en nuestro quehacer profesional como arquitectos diseñadores y por lo tanto fue cuidadosamente diseñada y seleccionada. Queríamos combinar diferentes tipos de iluminación: luces LED en el cieloraso, lámparas de techo en vidrio y tela, la lámpara de pie hecha en corian y acero inoxidable, los apliques de pared en alabastro... La mayoría de estas lámparas fue diseñada y fabricada por la firma Octubre, para la cual trabajamos desde hace varios años”. La idea era que en la noche el espacio  se llenara de vida a medida que se encienden las luces, mientras los colores y las texturas resaltan.

 

La iluminación rigurosamente estudiada y ejecutada es la que realza esos detalles de diseño y decoración instalados aquí y allá que se traducen en textiles, papeles de colgadura o materiales con mucho carácter que transforman un primer hogar en un refugio muy chic.
 
Redacción: Patricia Ruan García-Herreros / Revista HABITAR