Suavizar y lavar la ropa: aplica una taza de bicarbonato en el agua de tu lavadora, de esta manera ayudas a suavizarla y también equilibras el pH. El bicarbonato además ayuda a que tu ropa salga más fresca y liviana. Ideal para tratar la ropa de bebés o personas con piel sensible.
 

Del mismo modo, elimina los olores del sudor o humedad y sirve como blanqueador para quitar las manchas más duras y complicadas.


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Limpiar tuberías: los productos que normalmente se usan para destapar las cañerías, son bastante fuertes y requieren una dosificación especial, además de eso, no pueden ser manipulados sin guantes, ni mucho menos ser aspirados. Una excelente opción para destapar el desagüe es aplicarle directamente bicarbonato y luego echar vinagre. Dejar que actuar como mínimo 15 minutos. Para terminar pon agua caliente en la mezcla.

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Cuidar las alfombras: aplica una dosis generosa en la alfombra que vas a limpiar, déjala actuar toda la noche y por la mañana barre o aspira tu tapete. Es una buena opción para eliminar el olor de perros y gatos. También se puede hacer lo mismo en con la tapicería de tu auto.
 

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Eliminar las cucarachas: mezcla azúcar y bicarbonato en partes iguales, distribuye el contenido en los rincones de tu casa donde creas que están los insectos. El dulce perfume del azúcar cautivará a las cucarachas, que irán en su búsqueda y acabarán ingiriendo el producto.

Al consumir el bicarbonato, este generará una reacción desastrosa en el interior de su cuerpo hasta acabar con su vida.


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Limpiar el horno: para dejar tu horno reluciente, toma un vaso de agua y aplícale una cucharada de bicarbonato, envásalo en un atomizador, salpica completamente las paredes interiores del horno y deja actuar toda la noche. Al otro día pasa una esponja humedecida con jabón y mira como desaparece toda la grasa.


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Absorber olores: el bicarbonato es un neutralizador natural de olores orgánicos, es decir, animales, comida y sudor. Lo puedes usar en tus zapatos, en los cestos de basura, en la cama del perro, en el arenero del gato, en el refrigerador.
 

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Preservar los alimentos: puedes poner un recipiente con un poco de bicarbonato dentro del refrigerador, esto ayudará a conservar mejor tus alimentos.
 

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Limpiar juguetes: mezcla 4 cucharadas de bicarbonato con un litro de agua, sumerge los juguetes  en la preparación, enjuágalos al día siguiente con una esponja con jabón, así evitarás que virus y bacterias se propaguen.
 

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