La sala o, como algunos la llaman, el centro del hogar es uno de los espacios emblemáticos de las casas, no solo porque es ideal para recibir visitas, sino porque allí se concentra el estilo decorativo.

 

Ello hace suponer a muchos que para lograr una decoración y adecuación de este lugar se requieren grandes cantidades de dinero. Sin embargo, con poco presupuesto se puede lograr un espacio acogedor y con mucho estilo, adecuado para reunirse en familia, con amigos o simplemente para relajarse, leer o escuchar música.

 

Tres expertos en decoración e interiorismo tienen varias ideas creativas para lograr una remodelación, sin necesidad de invertir mucho. Incluso, estas ideas son útiles para quienes deben empezar desde cero a decorar una sala con poco dinero.

 

Mercedes Robledo

Arquitecta y decoradora de interiores

 

Para empezar es necesario realizar un listado de prioridades y una ruta de trabajo, para saber en qué cosas se pueden invertir y cuáles se pueden realizar o restaurar.

 

Por ejemplo, muchas veces basta con pintar una pared para cambiar el tono y el ambiente, lo que no implica una gran inversión.

 

Retapizar los muebles es mucho más económico que comprar nuevos. Basta con escoger una buena tela, acorde con el ambiente que se quiere lograr.

 

Ubicar piezas pequeñas como mesas auxiliares le da movimiento al espacio, y algunas son muy económicas.

 

Néstor Trujillo

Arquitecto y docente de Investigación de la Facultad de Diseño, Imagen y Comunicación de la Universidad El Bosque.

 

Se debe pensar en qué se quiere lograr, pues es diferente hacer cambios en la adecuación, es decir, en las características espaciales de la decoración, al cambiar los elementos que generan sensaciones secundarias en los espacios, o cambios de interiorismo, lo que se logra con modificaciones en la arquitectura.

 

Una vez decido lo anterior, se deben considerar las condiciones humanas de quienes viven en el espacio, la habitabilidad del mismo, así como los aspectos sensoriales y emocionales que se quieren lograr.

 

Si lo que se desea es cambiar el piso, existen diversas opciones de laminados que son muy económicos, los cuales deben ponerse en sentido longitudinal. Otra alternativa es dejar los pisos esmaltados de concreto, que además tienen pigmentos con mucho diseño.

 

En cuanto a los muros, los tonos claros siempre generan más amplitud del espacio porque reflejan más la luz, mientras que los oscuros no. Tenga en cuenta también que es mucho mejor la sobriedad y no recargar las paredes con diferentes tonos.

 

María Paola Sánchez

Artista experta de decoración

 

Antes de empezar a llenar el espacio, sin ideas claras, se pueden buscar, en internet o en revistas, referentes de lo que se quiere lograr.

 

Comprar y restaurar muebles de los años 50 y 60 es mucho más económico que adquirir muebles nuevos.

 

Es un error reciclar muebles que nos regalan, porque ello genera espacios llenos con una mezcla sin sentido, sin personalidad ni carácter. Por eso es mejor esperar e ir acomodando cosas pequeñas. No recargue las paredes de colores. Puede dejar algunas blancas y en otras simular un papel de colgadura. Esto se hace con un modelo de cinta de enmascarar en la pared, y se pinta con los tonos que le gusten.

 

En el mercado hay tapetes muy económicos; estos siempre hacen que el ambiente se vea más acogedor y cálido.